Las áreas que más recursos van a absorber
para ganar eficiencia y propuesta de valor
Para Íñigo Gallastegui, director de Producto y Estrategia de Inversión y Servicios de Asesoramiento de Santander Banca Privada España, hay 4 áreas que, en general, coinciden con el resto del sector: regulación, para adaptarse a los requerimientos técnicos y a las medidas de sostenibilidad; digitalización, que “nos ayuda a ser más eficientes”; talento, que “es la clave de este negocio”; y servicios, para “compensar los menores márgenes y mantener y mejorar la cuota de mercado” con un servicio 360.
Fernando Ruiz, director de Banca Privada en España de BBVA, también considera que la inversión en tecnología es “básica para compensar la caída de ingresos y el encarecimiento de costes, mejorar la relación con el cliente y atraer y retener talento”. En este punto, apuesta por la Inteligencia Artificial para conocer mejor al cliente y “adaptarse a sus gustos y personalizar” los productos y servicios. Asimismo, la tecnología es utilizada para mejorar la eficiencia a nivel de banqueros y garantizar la seguridad de la información.
El reto, para Juan Bernal Aranda, director general de CaixaBank AM, está en “ir más allá de la pura capacidad de la gestión de inversiones y poner en valor el servicio que aportan otras áreas”, además de ofrecer nuevas soluciones adaptadas a las necesidades de los clientes, “intentando proporcionar la mejor experiencia al cliente con una propuesta integral”. Para ello, es crucial la inversión en tecnología, en general, y en inteligencia artificial, en particular.
También apuesta por la tecnología Joaquín Calvo-Sotelo, director de Banca Patrimonial de Bankinter, para identificar nuevos servicios, entre ella, la Inteligencia Artificial. “Estamos usando la IA al servicio del cliente, del banquero y de la gestión de activos. Si lo conjugas bien, realmente consigues ser más eficiente y llegar a más clientes”, añade el directivo.
Por su parte, Xavier Blanquet, director de Negocio de Sabadell Urquijo Banca Privada, opina que “la inversión en formación es crítica”, dado que lo que marca la diferencia entre las gestoras de banca privada es el talento. También es clave destinar recursos a todo aquello que ayude a hacer más eficientes los procesos, como es la Inteligencia Artificial, y a desarrollar herramientas para mejorar la experiencia de los clientes.